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miércoles, 19 de agosto de 2009

Reseña La Materia Oscura, trilogía




Uno creía que con superhéroes como Superman, Batman, Flash; que con dibujos animados como Dragon Ball, Pokemon o los Thundercats; que con libros como Harry Potter, El Señor de los anillos, Las Crónicas de Narnia, la imaginación había sido empujada a sus límites. Que ya no quedaba nada por inventar sin caer en la mera repetición de historias con distintos nombres de protagonistas.

Pero de repente aparece, en alguna parte del mundo, un señor llamado Philip Pullman y nos cierra la boca a todos con una trilogía de libros llamada La materia oscura. Nombre que da intriga, pero que uno puede pensar q es del estilo Stephen King. Sin embargo cuando se leen las primeras página uno se entera que la protagonista es una niña huérfana que vive en Oxford, cuidada por los licenciados (especies de curas). Raro, aunque similar a Las Cronicas de Narnia. Se avanza en la historia y resulta que la madre era descendiente de una dinastía reinante que tuvo un affaire con un hombre y concibieron a la protagonista. Pasamos al rubro telenovela Mexicana. Todo para llegar al final donde se abre un portal a otros mundos. Sí, pérdida total de referencias posibles.

Uno puede pensar que el autor de este artículo está delirando, pero no. Ese podría llegar a ser la síntesis de uno de los libros más volados (por no encontrar una palabra más acertada) que leí en mi vida. Porque aunque no lo crean quedan muchos detalles por contar: las personas tienen animales por almas, estudian la teología experimental y la ambarología, hay distintas razas de seres humanos con diferencias sutiles a la vista, pero no a los nombres (giptanos, brujas). Todo ello para darse cuenta en la segunda parte de la saga, todas esas cosas complicadas de leer y memorizar son iguales a las cosas que nos rodean pero con distintos nombres.

La brújula Dorada, con ese nombre fue llevada al cine. La película la protagoniza una niña unknown a pleno y la multifacética Nicole Kidman. Mirarla, llena de intrigas y entenderla, es el lujo de pocos ilustrados. Porque ver una película en la que se quiere develar el misterio del polvo y la última línea de dialogo sea: “Lo único que falta por saber es qué es eso que llaman polvo” es lo mismo que cuando un diccionario te dice “funcionamiento: de funcion”.

Y es en ese momento en el que uno comete la gran estupidez de sus vidas y googlea el libro, lo baja, lo imprime y lo empieza a leer. Uno entra en una adicción de aborrecimiento. Lo lee porque la intriga le impide dejarlo, no para de insultar a ese hombresito inglés que superó a la Rowling de Harry Potter.

Pero en esa relación de odio, se descubre que en realidad el libro le empieza a gustar. De la crítica desaforada, se pasa a los elogios. De hablar del maldito de Pullman, se pasa a hablar del amigo Philip. De odiar a Lyra, a Iorek, a Grumman, a Asriel, a la Señora Coulter, uno empieza a tomarles cariño. Se empiezan a notar las diferencias entre los mundos, entre las razas, se descubre los espantos, se entiende de ambarología. Se descubre el estado para leer el aletiómetro, se aprende a usar la daga. Todo aquello que carecía de sentido, ahora son teorías que se presentan claras a la mente.

Y sí... ese es en el momento en que se puede decir que “La Materia Oscura” nos cagó la vida.

Reseña Eragon


Un dragoncillo y su amigo. Para alejarse de los clichés y del odiado "obvismo" el señor Christopher nombró Eragon al chico y Saphira a la dragona. Sí, totalmente inverso a lo que uno puede encontrarse en cualquier avenida de la ciudad. Seguramente el hijo del señor se llame berro y el perro Juan, muy usual.

Pasado el embrollo de nombres, una historia de histeriqueo y lucha. Sorprenderá la palabra "histeriqueo" en la reseña de un libro cuasi-épico, pero si las relaciones humanas reales fueran con ese nivel de histeria no podríamos hablarnos, nos odiaríamos demasiado los unos a los otros. Rápidamente se descubre porqué no sucede esto: tienen el poder de la telepatía. Así todos somos amigos. Imaginense cuantas cosas se podrían llegar a hacer con este tipo de poder. Y lo mejor de todo, es que el protagonista es fan de esta habilidad, no como los giles de Potter y Bolson que nunca les cabió ser especiales.

Más adelante la historia se complica a nivel léxico. Todos sabíamos que iba a haber magia, pero nadie sabía que sería ilegible. Una buena técnica es identificar los hechizos por su primera letra, o a lo sumo por su longitud, aunque podríamos advertir que el señor no es muy seguidor del minimalismo.

Cual Comunidad del Anillo, se van uniendo personajes al viaje de Eragon. Cual Comunidad del Anillo, viajan días y días a caballo por paisajes envidiables. Cual Comunidad del Anillo, se alían enanos, elfos y humanos en una lucha contra un malo todopoderoso. Cual Comunidad del Anillo, el objetivo del libro es llegar a un lugar donde se está protegido mágicamente contra el enemigo. Cual Comunidad del Anillo, la historia queda abierta a una nueva aventura. Cual Comunidad del Anillo, el chico es elegido por la cosa de valor. Ehhh, ¿Hace falta aclarar?

La historia queda supeditada a una segunda parte en la que continuará el entrenamiento. Resumen premonitorio: más palabras ilegibles, más razas inimaginables, más muertes, más leguas de viajes y muchas muchas más descripciones. Básicamente: imperdible.